El equipo de ingeniería de la nave espacial Voyager 1 de la Nasa está tratando de resolver un desconcertante misterio : el explorador interestelar está operando normalmente, recibiendo y ejecutando comandos desde la Tierra , junto con la recopilación y devolución de datos científicos. Pero las lecturas del Sistema de Control y Articulación de Actitud (AACS, su sigla en inglés) de la sonda no reflejan lo que realmente está sucediendo a bordo. El AACS controla la orientación de la nave espacial, que ya suma un viaje de 45 años. Entre otras tareas, mantiene la antena de alta ganancia de la Voyager 1 apuntando con precisión a la Tierra , lo que le permite enviar datos a casa. Todos los signos sugieren que el AACS sigue funcionando, pero los datos de telemetría que devuelve no son válidos. Por ejemplo, los datos pueden parecer generados aleatoriamente o no reflejan ningún estado posible en el que podría estar el AACS. Lea también en Qué Pasa: Viruela del mono: ¿qué es esta pel